Comprender el trauma y la violencia

Pregunta

Salí a tomar algo con un amigo y él no dejaba de intentar tocarme, poniendo su mano repetidamente en mi muslo. Cada vez que lo apartaba, su mano subía más. ¿Se considera esto agresión sexual aunque ambos estuviéramos completamente vestidos?

Respuesta

Gracias por contactarnos y compartir tu experiencia. Lo que compartiste parece ser contacto sexual no deseado y repetido que continuó a pesar de tus límites físicos claros. La agresión sexual se refiere a cualquier contacto sexual no deseado sin consentimiento, independientemente de si había ropa de por medio. El hecho de que le apartaras la mano repetidamente demostró claramente tu falta de consentimiento; sin embargo, él insistió e incluso empeoró la situación moviendo la mano hacia arriba.

Sí, el contacto físico no deseado, incluso sobre la ropa, puede considerarse una forma de agresión o acoso sexual. Sin embargo, es importante reconocer que solo tú tienes derecho a definir y etiquetar tus propias experiencias. Algunas personas descubren que nombrar lo sucedido les ayuda a procesar sus sentimientos y buscar el apoyo adecuado, mientras que otras pueden encontrar las etiquetas limitantes o que no reflejan plenamente su experiencia personal. Cualquier terminología que te parezca adecuada, o elegir no usar ninguna, es totalmente válida.

El consentimiento es esencial en cualquier interacción física, y tienes el derecho absoluto de determinar quién te toca, cuándo y cómo, independientemente de tu relación con esa persona, de lo que lleves puesto o de si estás en una situación social, como tomar algo juntos.

Muchos sobrevivientes cuestionan sus experiencias, especialmente cuando la persona que violó sus límites era alguien que conocían y en quien confiaban. Esta duda es común y no invalida lo sucedido. Es completamente comprensible que te sientas inquieto por lo sucedido. Confía en tus instintos y sentimientos sobre esta situación. Tu incomodidad era real y válida.

Es importante reconocer que este comportamiento no es tu culpa y que no hiciste nada malo. La responsabilidad de respetar los límites siempre recae en quien inicia el contacto. Mereces sentirte seguro y respetado en todas las situaciones, incluso al pasar tiempo con amigos. Tu autonomía corporal es importante en todas las circunstancias.

Sanar tras haber violado los límites lleva tiempo, y está bien buscar apoyo. Si te sientes cómodo, considera hablar con alguien de confianza sobre lo sucedido, ya sea un amigo, un familiar o un profesional que pueda ofrecerte apoyo y orientación. Recuerda que no estás solo/a y que hay personas que se preocupan por ti y quieren ayudarte. Cuidarte es la prioridad, y pedir ayuda es un primer paso valiente. Gracias por confiar en nosotros. No estás solo/a.

Salida de seguridad

Recursos